miércoles, 24 de febrero de 2010

¡¡¡ SOLO UN PASO MÁS !!!


¿Has pensado en cuántos pasos se deben dar para terminar un maratón?.
Fíjate, si una carrera de maratón mide 42 kilómetros y 195 metros, es decir 42,195 metros y pensando que un paso promedio mide un metro (dame ese beneficio por facilidad aritmética) entonces se necesitarían ¿¿?? pasos.

¿Te has preguntado alguna vez cuántos escalones se deben subir para alcanzar el mirador del Empire State (piso 86)?
Esta es más fácil todavía, seguramente ya “googleaste” la pregunta y te dió como respuesta ¿¿?? escalones.

¿Tienes idea de cuantas brazadas se necesitan para llegar nadando a la otra orilla del Canal de la Mancha? Ojo, son 32.55 kilometros, es decir 32,550 metros (entre Dover y Cabo Griz-Nez).
Esta es un poco más difícil ¿no crees?, esta vez recurriré a Wikipedia, donde señala que una braza (brazada) mide 1.6719 metros, entonces necesitarías ¿¿?? brazadas para llegar a la orilla del Canal.

Y podemos seguir jugando a buscar los pasos necesarios para llegar a la cima del Everest o las remadas indispensables para cruzar la meta en una competencia de kayak, o por que no preguntarnos cuantas etapas debo sortear para cumplir mis objetivos.

Solo quiero decirte una cosa que me gustaría tuvieras presente cuando en tu mente corran frases como:
 ¡Ya me cansé! 
¡Es que no voy a terminar nunca!
¡creo que voy a desistir!... piensa en esto:

Los 42,194 pasos para correr un maratón no serían nada si no das el último.
Los 1,575 escalones para subir el Empire State no son nada si no subes el último.
Las 19,467 brazadas para cruzar el Canal de la Mancha no son nada si no das la última.
Las 999,999 etapas que hayas alcanzado para lograr tus sueños, tus objetivos, no servirán de nada si no alcanzas la última etapa.

Solo te falta un paso, el último, el que te llevará directo a tu objetivo, cualquiera que este sea.

No dejes de darlo, no lo olvides, todos los anteriores te trajeron aquí, pero este, el último, es el que te llenará de orgullo y hará que todo lo anterior haya valido la pena.

"Verás que la felicidad se expande, la sonrisa se vuelve pandémica y la vida se hace mejor."

Saludos
Gerardo González Guzmán

jueves, 18 de febrero de 2010

YO QUIERO IR EN ESE AVIÓN


Foto tomada del sitio de la Fundación Mexicana de Aviación I.A.P.

¿Qué piensas cuando ves un avión? pregunté hace poco y la respuesta que recibí me sacudió como un temblor de alta graduación en la escala de Richter, fue un empujón a la esperanza, a los sueños, a la capacidad de sorprendernos, de reír por cualquier motivo y agradecer día a día nuestra vida, situaciones todas que en mayor o menor medida hemos olvidado.

¿Dónde se quedó mi ilusión por ser bombero, soldado, doctor?, ¿dónde dejé guardadas las ganas de comerme a escondidas un pastel de chocolate?, ¿dónde perdí la fortaleza que me guiaba hacia mis más alocadas aventuras?, ¿en que momento decidí que mi vida debía ser como los demás esperan que sea?, ¿cuándo arrumbé mis ganas de pintar, de escribir, de tocar, de bailar por la sombría obligación del día a día?, ¿cuándo borré de mi agenda el tiempo para mi?.

“Yo quiero ir en ese avión” fue la respuesta que me hizo preguntar ¿qué tan feliz eres?, es que resulta muy interesante que contestamos ágilmente a esta pregunta con un “mucho, si, claro” sin realmente hacer una introspección para evaluar eficientemente si somos como queremos ser obteniendo entonces una felicidad plena.

¿Cuántas veces te has preguntado y contestado con honestidad, si verdaderamente te encuentras compartiendo la vida con las personas adecuadas, si estás colaborando en una empresa que te gusta, si estás realizando actividades que te satisfacen, en resumen, si estás siendo feliz?

¿Compartes tu vida con las personas adecuadas?, no me refiero únicamente a tu pareja, sino tus compañeros de labor, tus amigos, tus vecinos... ¿te agregan y les agregas valor?, ¿Estás con ellos por que siempre ha sido así o por que realmente deseas estar con ellos?, ¿Se brindan respeto y aceptación?, ¿los escuchas y te escuchan?. ¿alguna ves has sentido que vives una soledad en compañía?

¿Estas colaborando en una empresa que te gusta?, donde encuentras una actividad que coincide con tu escala de valores, un ambiente que te otorga respeto y valía como persona? Puede ser que hoy me digas que estas ahí por que no te queda de otra, que aguantas al jefe por que no tienes otra opción. ¿Y tu felicidad?, ¿no es al final lo más importante, lo único que debería contar?

Atrévete a formularte estas preguntas para todos los aspectos de tu vida.

Yo también quiero ir en ese avión, que me lleve a elegir lo que realmente me haga feliz y no lo que los demás esperan de mi, yo quiero ir en ese avión tomando el valor para dejar atrás todo aquello que no me deja ser feliz, que me merma la fortaleza para reinventarme, para renovarme, para re-vivir, para crecer.

Yo quiero ir en ese avión... destino, la felicidad. ¿y tú?

"Verás que la felicidad se expande, la sonrisa se vuelve pandémica y la vida se hace mejor."

Un abrazo

Gerardo González Guzmán

jueves, 11 de febrero de 2010

EL CIRCO DE LAS MARIPOSAS

  

El circo de las mariposas... ¿que locura es esta? Pensé cuando me recomendaron ver este cortometraje.

Debe ser divertido y me dije... bueno si tu eres capaz de llevar a tus visitas de hospital, como médico de la risa, un circo de pulgas (juro que soy dueño de un maravilloso circo de pulgas) por que alguién más no puede tener un circo de mariposas... deberías verlo...


No me dieron más datos así que la imaginación (mi querida ardilla) empezó a correr rápidamente, pensé en colores, en transformación, en volar, en alegrar la vista con mi vuelo... pensé un millón de cosas...

Por fin lo vi, lo que me encontré es un cortometraje de Eduardo Verástegui simple y sencillamente maravilloso.

Te invito a verlo y a compartirlo, aqui las ligas de las dos partes... espero realmente lo disfrutes, lo valores y te regales un poco de tiempo para buscar, dentro de ti, esa magia, ese don, ese regalo que la vida te ha dado para que tus ojos se llenen de chispa contagiosa que logre cambiar al mundo.

El circo de las mariposas. 1era Parte

El circo de las mariposas 2da Parte


"Verás que la felicidad se expande, la sonrisa se vuelve pandémica y la vida se hace mejor."

Un abrazo

Gerardo González Guzmán

jueves, 4 de febrero de 2010

NO TE DOY PERMISO


En estos días he venido reflexionando sobre “el poder que otras personas pueden tener sobre nuestras vidas”, y lo pongo entre comillas por que justo así es como lo sentimos, lo vivimos y lo decimos.

Es que “me hace enojar”, es que “me hizo sonreír”, es que “me ofendió”, “ya no puedo más”, “no aguanto tanta presión”y un millón de frases más como estas vamos diciendo todos los días en nuestro andar por la vida.

¿Te has sentido así?, ¿te has descubierto diciendo estas cosas?, creo que te tengo noticias...

Tú has dado autorización a esas personas para que dominen tu vida, para que tracen el camino que debes andar y, peor aún, para que dicten el sentimiento que debes sentir cada día de tu vida. Tú y solo tú has permitido que tu vida sea dibujada por terceros.

Reflexiona un poco lo anterior, estoy seguro que descubrirás que aquel tercero que “te hizo enojar”, ni enterado está que te hizo enojar, solamente dijo lo que pensaba y tu permitiste que el enojo entrara en tu cabeza.

Te garantizo que esa persona no está todo el día pensando en como saturar tu agenda, descomponer tu día, cambiar tu destino, romper tu sonrisa o simplemente cambiar tu semblante. Ese tercero, no tiene idea de la importancia que para ti significan sus actos. Esa importancia se la has dado tu, de manera consciente o inconsciente. Quizá por una liga familiar, laboral o afectiva, pero el permiso lo has dado tu.

1.- Atrévete a romper esas ataduras. No tengas miedo de hablar con claridad acerca de tus sentimientos con esa persona. Expresa directamente el daño que te hace y pide que cambie su forma de ser contigo. Y queda dispuesto a romper esa relación que sin duda te daña.

2.- Revoca y niega esos permisos. Habla contigo mismo y déjate en claro que a partir de este momento todos esos permisos que has dado en tu vida quedan cancelados, revocados, clausurados y que no darás más permisos a nadie para que domine tu vida. El dueño de tu vida eres tu y solo tu.

3.- Haz que “se te resbale”. No le des importancia a lo dicho por terceros. Tu tienes claro tu objetivo y debes seguir fiel a el, corrigiendo camino, ciertamente, mejorando el final, seguramente. Pero eres tú quien decide tu vida, no debes dar importancia a aquellos que has detectado como “conspiradores” o “comploteros”. Piensa que quizá tu éxito a esos egoístas no les conviene.

4.- Toma decisiones. Ya lo comenté en mi post “Primer paso para ser feliz” No tengas miedo de vaciar tus cajones, elimina todo lo que te estorba y en ese punto me refería también a personas que no te agregan valor.

Créeme, vale la pena intentarlo, al final, el objetivo es claro: Recuperar el control de tu vida.

Verás que la felicidad se expande, la sonrisa se vuelve pandémica y la vida se hace mejor.

Un abrazo

Gerardo González Guzmán