viernes, 5 de octubre de 2012

GRANDES CORAZONES



Hace unos pocos días tuve el honor de conocer a un ángel que ha venido a revolucionar mi vida, a compartir una serie de cosas, casos, emociones y sensaciones, todas, sumamente afortunadas.
 
Ha sacudido tremendamente esa parte filantrópica, altruista, voluntariosa, amorosa que siempre me ha existido, he reaprendido y revalorado la magia que se obtiene-entrega cuando piensas en una causa superior a ti mismo, como saben, en mi caso la sonrisa.
 
Ha venido a recordarme y reforzarme el valor de la pasión en tus sueños.
 
De pronto, en momentos muy duros de mi vida, he sentido que la fuerza, la esperanza, la visión y la certeza de que nuestro esfuerzo alegre va valiendo la pena se va perdiendo, va dejando de funcionar, si es que alguna vez ha funcionado.
 
Algunas veces he sentido que este asunto de la risa, la alegría y la felicidad no es más que un cuento de hadas y un castillo de aire que yo solo me he venido construyendo para protegerme de "no sé qué", una coraza para ocultarme de mi mismo, para no dejar salir o entrar los sentimientos y las emociones.
 
A veces he creído que esto de la risa, la alegría y la felicidad no es más que un invento de alguien que otros "alguienes" hemos seguido solamente como un desesperado esfuerzo de cumplir con el escalón de pertenencia de la pirámide de Maslow...
 
A veces he creído que todos los detractores con los que me he topado en la vida, tengan razón y deba dejar este cuentito chino a un lado y regresar al convencionalismo social del “amargamiento” racional como método de aceptación y adaptación.
 
Pero al entrar en un salón, pletórico de personas todas con un corazón inmenso, comprometidas con una causa social, con México, la que sea, salud, educación, pobreza, discapacidades, etcétera, tan heterogéneas entre sí me resultó muy sencillo conocer y entender sus coincidencias:
 
1.- Amor por su causa, por la vida.
2.- Profesionalización de su labor en favor de su causa, de su vida.
3.- Entrega absoluta y 24/7 en favor de su causa, de su vida.
4.- Su vida es su causa; su causa es su vida y su causa les da luz en la vida.
5.- Abiertos a compartir ideas, mejores prácticas, mejoras, advertencias, en fin no existen secretos profesionales, industriales o de proceso cuando del bien común se trata. 

Hoy confirmo nuevamente lo que siempre he dicho. "Somos más los buenos que los malos."
 
Cumbre Iberoamericana de Desarrollo Institucional.

Después de estos dos días absorbiendo como esponja lo vertido en la “Cumbre Iberoamericana de Desarrollo Insitucional”, organizada, entre otros por la Junta de Asistencia Privada del Distrito Federal en donde tuve la suerte de escuchar grandes ideas por parte de grandes corazones ( @Victor_Gordoa @CidiMX @bernardrossmc @CesarSolares @RaquelOrigel @McMama_2 @EnriqueKrause ) solo puedo decir:
 
Estoy más claro que nunca, la sonrisa es mi causa. 
 
Ojalá que pueda lograr, algún día, hacer de mi vida mi causa, justo así cómo este gran ángel me ha enseñado en estos días.
 
Estaré escribiendo más sobre este gran evento, conceptos, ideas captadas, magia recibida. 
 
"Verás que la felicidad se expande, la sonrisa se vuelve pandémica y la vida se hace mejor."
 
Un abrazo
Gerardo González Guzmán
@DoktorVakero